Esta jornada académica fue guiada por la licenciada Oderay González y en la misma los maestros participantes de las escuelas Manuela H. de Pérez, Rómulo Arrocha Álvarez, José De Los Santos Gutierrez, Isauro José Carrizo, y Rubén Darío, expresaron sus puntos de vista en torno al seguimiento de esta iniciativa y coincidieron en que este proyecto piloto debe mantenerse con los mismos maestros que han tomado la capacitación, toda vez que en sus respectivos centros de enseñanzas podrían ser cambiados de grado el año entrante con lo cual no se aplicaría la Guía Académica porque la misma está diseñada para estudiantes de cuarto a sexto grado.
La maestra Silvia H. de Quintero, de la Escuela Manuela H. de Pérez dijo que la Guía Didáctica de Joel Farrugia da líneas y perspectivas para mejorar la ayuda que debe ofrecer el educador a los niños y niñas para controlar la violencia, que es un problema social. Me va a ser de ayuda, sobre todo en mi escuela que esta ubicada en una barriada considerada como de altos niveles de violencia a tal punto que ya se considera que es algo normal, “el pan de cada día”.
“Le quiero pedir al autor que comparta con los docentes de mi escuela, yo lo invito a que nos visite y de esa forma puede conocer más de la realidad que vive el docente en el aula de clases, porque esa guía que él ha confeccionado es fantástica y hay que llevarla a la realidad del aula de clases, es una invitación muy cordial para que visite la Escuela Manuela H. de Pérez, que también está inmersa en esa problemática”, enfatizó la maestra Silvia de Quintero.
La maestra Yanitza González de Rodríguez, de la Escuela Rómulo Arrocha Álvarez, primeramente agradeció a la Directora de su plantel educativo por haberla seleccionado para formar parte de este proyecto muy significativo para los docentes, porque esta Guía Didáctica les permitirá obtener un mejor resultado en el rendimiento académico y con ello lograr el objetivo trazado que es evitar la violencia entre los estudiantes y por ende en el hogar.
En nombre de los docentes que participaron en el seminario, el educador Robert Hernández, de la Escuela Rubén Darío, dio las palabras de agradecimiento al personal del Órgano Judicial y a los representantes del MEDUCA, resaltando que se han sentido comprometidos con este proyecto, que va a llenar un vacío en cada una de las escuelas que fueron escogidas para el plan piloto.
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